Los drones se han popularizado tanto en los últimos años que su práctica desmedida, en algunos casos, ha generado la necesidad de definir una serie de pautas para un empleo más responsable.
Así como se han convertido en una herramienta muy favorable para la creación de contenido multimedia y transmisiones en vivo, también ha provocado algunos accidentes: enredos en las líneas eléctricas, daños en vehículos por caídas, incendios por rotura de circuitos o golpes a personas.
Es por ello por lo que el Reglamento de Ejecución (UE) 2019/147 de la Comisión Europea, que se encuentra activo desde julio de 2021, establece algunas de las obligaciones y condiciones para su uso. Así, dictamina que el seguro de responsabilidad civil de drones es obligatorio, excepto para aquellos relacionados con servicios militares.
¿Qué sucede con los drones de menos de 250 gramos o los que se consideran como juguetes? En estas situaciones, el seguro de responsabilidad civil es recomendable, pero no obligatorio.