Todo el mundo en mayor o menor medida ha vivido alguna vez un apagón de luz. Seguramente, cuando eras pequeño lo vivieses como una aventura, sin embargo, cuando eres adulto y es tu hogar el que se ha quedado sin suministro eléctrico, la situación ya no resulta tan interesante.
Si te has quedado sin luz en tu vivienda, a continuación, te indicamos los pasos que deberías seguir para intentar restablecerla antes de ponerte en contacto con tu seguro de hogar.
Alcance de la avería
Si el apagón es general
El apagón es solo en mi casa
Si la falta de luz se da solo en tu vivienda puede tratarse de diversas causas. Vamos a revisar algunas de las más comunes.
Por ejemplo, ¿tenías muchos aparatos eléctricos conectados? Es posible que si has contratado una potencia baja y tienes en funcionamiento varios aparatos eléctricos (horno, microondas, lavadora, secadora, ordenador, secador, etc.) la demanda que hayas hecho de electricidad sea superior a la que figura en el contrato. En este caso la solución es planificar las tareas de la casa y hacerlas en diferentes horarios, o bien, estudiar la posibilidad de subir la potencia contratada. Ve al diferencial (suele estar en la entrada de la vivienda) y levanta la palanca que haya saltado (solo si es moderna y está en buen estado, si no, es mejor llamar a un electricista).
Si no tenías muchos aparatos conectados y el apagón se ha producido al encender algún electrodoméstico (tostadora, batidora, lavadora, etc.) es posible que la avería esté directamente en el enchufe que estés utilizando. Para asegurarte, tendrás que reiniciar el diferencial. Desconecta el aparato que te ha dado problemas, ve al cuadro eléctrico, baja todas las palancas de una a una y vuélvelas a subir. Si recuperas la electricidad, intenta conectar el aparato en cuestión a otro enchufe. Si todo funciona normal, seguramente haya un cortocircuito en el enchufe inicial. Llama, entonces, a un electricista. Si vuelves a quedarte sin electricidad es posible que el aparato tenga algún problema que afecte a la red eléctrica.
Si al tocar el diferencial vuelves a quedarte sin luz, es importante que detectes en qué zona de la casa está el problema. Cada grupo de palancas corresponde a una fase y cada fase a una zona de la casa. Intenta dar electricidad al mayor número de zonas de la vivienda (para tu comodidad, ya que es importante que la cocina tenga luz para evitar daños en los alimentos y/o medicinas de la nevera y congelador) y deja bajadas las palancas que provoquen el apagón.
Llama a tu seguro de hogar
Tanto si localizas la avería como si no, puedes llamar a tu seguro de hogar para que te envíen a un electricista de urgencias que intente devolver el suministro eléctrico a tu hogar. Si no puede hacer una reparación definitiva en ese momento, al menos intentará hacer una provisional para devolver la luz y reparar el problema cuando disponga de los materiales adecuados.
Si te has quedado sin luz en tu casa o tienes algún problema eléctrico, recuerda que puedes consultar a la asistencia de tu póliza, ya que hasta los seguros más baratos de hogar suelen tener incluida garantías relacionadas con las urgencias. De todas formas, si tienes alguna duda, siempre puedes ponerte en contacto con alguno de nuestros asesores a través del formulario.