La llegada de los vehículos eléctricos a nuestras vidas ha revolucionado nuestra forma de movilizarnos. Es un sector que se encuentra en alza, apoyado también por las ayudas que impulsa el Gobierno para su adquisición. Aunque existen ciertas desventajas, tal parece que ganamos mucho más cuando decidimos sumarnos a la revolución eléctrica.
En concreto, las motos de este tipo han cambiado y para bien. Los modelos básicos quedaron atrás para darle paso a alternativas mucho más dinámicas y versátiles. Ahora bien, ¿el consumo de una moto eléctrica es menor al de una convencional? Efectivamente. De hecho, esta es una de las características que más motiva a los consumidores a olvidarse de las motos tradicionales.
Si te preguntas cuánto gasta una moto eléctrica, lo primero que debes tener en cuenta es que, a diferencia de los vehículos de gasolina, cuenta con un sistema de carga bastante sencillo, lo que la hace mucho más económica. Las baterías con las que están hechas las motos cero emisiones no superan los 5 kWh y, por ello, el coste de recarga es bastante inferior al de una moto convencional. Te puede llegar a costar hasta cuatro veces menos que repostar en una gasolinera.