La compra de un barco implica una serie de responsabilidades que debes asumir para que la embarcación se mantenga en buen estado tanto a nivel mecánico como a nivel estético. La planificación y el destinar un presupuesto para ello, así como un buen seguro de embarcaciones, nos ayudará a proteger nuestra inversión, alargar la vida de la embarcación y mantener los costes al mínimo.
Cuida las maderas
La madera es uno de los materiales más frecuentes en la construcción naval. Los modelos de vidrio o aluminio suelen tener cubiertas de teca, proveniente del árbol del mismo nombre. La teca bien cuidada puede tener un periodo de vida útil entre 10 y 20 años, para los cuales es necesario aplicar las técnicas de limpieza adecuadas. Debes usar un cepillo de cerdas suaves y frotar de forma trasversal para no desgastar el material.
Los modelos cuya cubierta está hecha de madera son más vulnerables al deterioro causado por el agua dulce y helada, el sol y el golpe de las olas. También le juega en contra la falta de ventilación, por lo que las fundas que usemos para protegerlas deben estar fabricadas con materiales transpirables para prevenir la humedad y el moho. Esto no ocurre en los barcos fabricados con fibra de vidrio, pero igualmente afecta al inmobiliario interior.