En el mundo de los seguros de hogar hay una cobertura que suele generar cierta confusión. Hablamos de la cobertura de daños estéticos o restauración estética. Y es que, cuando nos encontramos con que nuestro parquet se está levantando, está es la cobertura que se activará para darnos respuesta siempre que el hecho que lo haya producido esté cubierto por las garantías de la póliza de vivienda contratada.
Gracias a esta garantía, la compañía aseguradora se encargará de cubrir los gastos necesarios para llevar a cabo la recomposición estética del bien afectado por un siniestro contemplado en las coberturas del seguro, como por ejemplo daños por agua, roturas de tuberías, incendio, etc. Podemos decir entonces que no se trata de una cobertura de aplicación directa, sino que la aseguradora debe poder responder por otra garantía.