Uno de los mayores riesgos de las luces y decoraciones festivas son los cortocircuitos. El árbol de Navidad podría causar un incendio en casa si te descuidas, así que siempre se aconseja apagar todas las luces cuando no estés en la misma habitación.
Además, cuando compres luces, iluminaciones y otros artículos navideños, sobre todo los eléctricos, tendrás que asegurarte de que lleven la marca CE para cumplir las normas de seguridad europeas. Es más, se aconseja que sean tipo led.
Otro elemento al que prestar atención es mantener las luces alejadas de las fuentes de calor y de los materiales fácilmente combustibles o inflamables. Lo correcto será mantener una distancia de al menos un metro y medio de precaución. También es recomendable desenchufar las luces cuando estén apagadas y mantenerlas alejadas del agua.
A modo de resumen, compartimos un decálogo de buenas prácticas para montar tus luces de Navidad de la forma más segura:
● Las luces de Navidad nunca deben dejarse encendidas durante la noche o al salir de casa.
● Hay que verificar, con mucho cuidado, que el producto esté bien montado, con todos los cables aislados y sin irregularidades.
● Es mejor elegir luces de bajo voltaje con una fuente de alimentación independiente para reducir el riesgo de incendios.
● Son recomendables las luces LED, ya que no se recalientan y soportan mejor la humedad y las vibraciones que las luces tradicionales.
● Si quieres decorar los espacios exteriores, es imprescindible utilizar luces específicas adecuadas para estos ambientes. Deben tener un aislamiento más eficaz y resistir a la humedad, la lluvia, el calor y el frío (como mínimo un índice de protección IP55).
● Las luces de Navidad no son juguetes, por lo que no deben dejarse al alcance de las mascotas o de los niños.
● Se aconseja emplear una sola clavija en cada enchufe, evitando triples inestables por el peso de demasiadas conexiones. En los casos en los que se necesiten varios y solo se disponga de uno, lo mejor es optar por las tomas múltiples, que son seguras y funcionales.
● Las luces, ya sean de interior o de exterior, nunca deben atarse con ganchos metálicos. De hecho, estos últimos pueden actuar como conductores en el caso de que se produzca la más mínima fuga de corriente.
● Si se funde alguna de las luces se sustituirá la totalidad del cordón, no reponiendo luces ni otros componentes del sistema, ni realizando empalmes en los cables que podrían provocar un cortocircuito y un incendio.
Si se utilizan cordones luminosos de años anteriores, hay que comprobar siempre que funcionen correctamente antes de instalarlos.