Hay emergencias que son previsibles y controlables, y contar con un seguro médico te puede ofrecer una gran tranquilidad. Un caso muy común son las alergias alimenticias: las familias suelen aprender a administrar dosis del antialérgico específico para poder reaccionar rápido y, además, le enseñan esto a los profesores y personas que tienen relación con el niño, para que sean capaces de hacer lo mismo en caso de una emergencia. Otras maniobras útiles en estos casos pueden ser la respiración boca a boca e incluso la reanimación cardiopulmonar (RCP).
Las situaciones de asfixia, fracturas, quemaduras, traumatismos y hemorragias son otras circunstancias que pueden requerir de una intervención rápida, por mencionar algunos ejemplos. Aunque cada uno es distinto y, por eso, vamos a repasar las recomendaciones y técnicas básicas que se pueden prestar en una emergencia.