La nueva Ley de Tráfico que entró en vigor en marzo de este año destaca por ser mucho más severa y rigurosa, principalmente, en lo que concierne al uso del teléfono móvil mientras conducimos.
Con la nueva Ley de Tráfico no solo se penaliza el hecho de utilizar el móvil mientras se lleva el coche, sino también que regula el uso de este tipo de dispositivos de muchos otros modos. Un ejemplo claro es cuando manipulamos la pantalla del móvil, aunque se haga con la colaboración de un soporte.
En su última actualización, la Ley de Tráfico no especifica nada relacionado con la posible existencia de los soportes de móvil homologados por la DGT. Lo que sí señala claramente en su artículo 13.2 es que el conductor está obligado a mantener su propia libertad de movimientos. Esto quiere decir que, el conductor debe asegurarse de contar con el campo de visión necesario para garantizar su propia seguridad y la del resto de personas con quienes comparte la vía pública.
En este sentido, cualquier conductor debe tener la atención siempre puesta en la conducción, así como mantener una posición adecuada y colocar correctamente objetos y animales que puedan impedir que se lleven a cabo desplazamientos seguros para todos.