Ventajas de diversificar tus inversiones

Como inversores, nunca tendremos total control sobre lo que pueda pasar, pero, hay una cosa que podemos hacer para aminorar el riesgo de perder todo nuestro patrimonio de golpe: diversificar la inversión. Si en estos momentos estás pensando en hacer crecer tu dinero a través de vehículos financieros como los seguros de ahorro, fondos de inversión o acciones, sigue con nosotros y descubre cuáles son las ventajas de no jugar todas tus bazas a una sola carta.

El concepto de diversificar la inversión es bastante sencillo. Consiste, literalmente, en no poner todos los huevos en una sola cesta. En términos financieros, no es más que repartir el capital que tenemos disponible para invertir en distintos tipos de activos e inversiones con la finalidad de construir una cartera mucho más resiliente ante los cambios súbitos del mercado.

Veámoslo con un sencillo ejemplo: Imaginemos por un momento que disponemos de 20.000 € para invertir. En lugar de centrar nuestra inversión exclusivamente en la compra de acciones en una sola empresa, lo que viene a decir la diversificación de inversiones es que podemos destinar ese capital a la adquisición de participaciones en distintas compañías.

De hecho, no todas nuestras inversiones tienen que estar distribuidas en un mismo mercado. En su lugar, podemos invertir tanto en activos en el mercado español como en empresas americanas, asiáticas o europeas.

La cuestión es tener nuestro dinero repartido entre distintos activos y reducir el riesgo de pérdidas.

Esta es, sin duda, la mayor ventaja de diversificar las inversiones. Invertir en diferentes clases de activos, sectores y ámbitos geográficos puede ayudarnos significativamente a proteger nuestra inversión contra los vaivenes del mercado y a reducir la correlación entre inversiones.

Cuando dos mercados están correlacionados de forma positiva, el comportamiento de ambos ante los mismos estímulos será muy similar. En cambio, cuando una cartera de inversión se compone por activos correlacionados de forma negativa, esta será menos volátil. Esto quiere decir que, cuando una parte de esos activos caiga, los otros subirán o mantendrán su valor.

Invertir en distintas clases de activos no solo nos ayuda a reducir la volatilidad, sino que también nos permite alcanzar mejores retornos de la inversión.

Cuando diversificamos la inversión, también aumentamos nuestras fuentes de rentabilidad. De esta forma, obtenemos los rendimientos de la evolución de distintos activos, industrias, mercados, divisas, etc. En otras palabras, cuando diversificamos, nos beneficiamos de todo el auge de todos estos componentes.

Cuando un inversor poco experimentado pone todos sus recursos en un solo activo, es muy difícil que alcance sentimientos de paz, confianza y tranquilidad respecto a sus inversiones. El gran problema de sentir miedo o ansiedad cuando invertimos es que somos más susceptibles a tomar malas decisiones.

Cuando invertimos en distintos activos, ocurre todo lo contrario porque tenemos la garantía de que si una empresa quiebra, no lo perderemos todo. Cuando diversificamos nuestras inversiones, desarrollamos una visión global mucho más estratégica.

Sabemos que esto de invertir sin experiencia previa puede ser complicado. Nadie quiere arriesgarse a perder el capital que tantos años ha costado construir. ¡Déjanos ayudarte! Desde Allianz contamos con distintos productos financieros tanto para invertir como para ahorrar.

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