Los expertos de Allianz Global Investors señalan que la inteligencia artificial tiene el potencial de provocar cambios significativos en nuestras vidas y en el entorno laboral. Sin embargo, para que esta tecnología funcione adecuadamente, es necesaria una infraestructura de procesamiento y almacenamiento adecuada.
El término "IA" abarca una amplia gama de tecnologías y técnicas de aprendizaje, y todas ellas requieren grandes cantidades de datos y una capacidad de procesamiento significativa para entrenar y ejecutar sus modelos.
La computación en la nube es esencial en este sentido, ya que solo los proveedores de servicios en la nube a gran escala, conocidos como hiperescaladores, pueden gestionar los enormes volúmenes de datos necesarios para el desarrollo de la IA generativa. Estos hiperescaladores necesitarán ampliar su capacidad a medida que los datos se vuelvan más complejos y voluminosos.