Ser padre o madre conlleva importantes responsabilidades y, sobre todo, muchas preocupaciones, entre estas, garantizar un cierto nivel de vida a los hijos. Si estos son económicamente dependientes del núcleo familiar, nos dejará más tranquilos tener la certeza de que, en caso de alguna desgracia, estarían cubiertos.
Un seguro de orfandad es un producto novedoso en el mercado asegurador y responde a esta necesidad: con la defunción o invalidez permanente absoluta del asegurado, es decir, del padre o de la madre del beneficiario, se garantiza una renta mensual a los hijos. Cabe indicar que puede ser necesario contratar aparte la opción de cobertura de invalidez, así que es siempre es recomendable aclarar con la compañía posibilidades más específicas del seguro, antes de firmar el contrato.
La pensión de orfandad, por lo general, se puede percibir hasta los 25 años, aunque también en este caso, dependerá del contrato.