Para hablar de la importancia del chequeo médico anual, es importante plantearse la siguiente pregunta: ¿vale la pena recomendarlo para personas fuera de los grupos de riesgo? Además de las embarazadas, los pacientes con exceso de peso, antecedentes familiares o trabajadores expuestos a sustancias tóxicas, ¿es necesario que una persona completamente sana y sin síntomas de ningún malestar se realice un chequeo médico al iniciar el año? ¿Es recomendable o es simplemente un negocio?
Si cuentas con un seguro de salud, lo más probable es que este chequeo está cubierto por tu póliza. Sin embargo, el debate sobre si son necesarios o no, se extiende a otros países de Europa como Dinamarca, que se plantea realizar exámenes genéricos a toda la población, aunque científicos de ese mismo país como Lasse T. Krogsböll afirman (según este ensayo publicado por él en el British Medical Journal) que estos exámenes no reducen el riesgo de mortalidad por problemas o enfermedades cardiovasculares.
Por otro lado, los chequeos médicos anuales no son las únicas acciones de detección temprana de enfermedades; las vacunas, por ejemplo, son una herramienta de prevención efectiva en el caso de los niños menores de 6 años de edad (que en España están cubiertas por el sistema de salud nacional). Las primeras que deben aplicarse son la de la tuberculosis (una dosis única) y la de la hepatitis B. En el caso de las mujeres en edad fértil, es necesario que se apliquen la toxoide tetánico y diftérico del adulto.