La prima de un seguro es el precio que vas a tener que pagar por él a la hora de contratarlo. Este pago, puede ser periódico, es decir que cada mes (cada tres meses, cada seis o de forma anual) o puede tener un valor fijo único que puedes pagar en una sola vez.
En el primer caso estamos hablando de primas periódicas, es decir, pagos que se realizan cada cierto número de meses. En el segundo caso, de lo que hablamos es de primas únicas. Un único pago para un seguro.
Las primas únicas, suelen estar vinculadas a este tipo de productos:
Habitualmente la forma de pago más cómoda es fraccionar el coste de tu seguro y pagarlo paulatinamente a lo largo de los años, pero en algunos casos se puede optar por usar un pago único.
Se da en los productos de inversión cuando tu tienes que aportar un capital concreto a la hora de contratar el producto y dejas tu dinero crecer en función de los valores del mercado sin tener que hacer más aportaciones si no quieres.
En los seguros de Decesos, muchas veces, está vinculado a la edad del tomador. Cuando se llega a cierta edad, los seguros suelen pedirte un pago único, en vez de irlo distribuyendo durante varios años.
Para los seguros de vida, en la mayoría de las ocasiones los seguros de prima única estaban tradicionalmente vinculados con los seguros de vida hipoteca y protección financiera, puesto que los bancos obligaban a contratarlos para asegurarse de que la hipoteca quedaba pagada aunque uno de los titulares falleciera.
En los seguros de decesos de prima única o de pago único, son una modalidad de seguros de fallecimiento diseñados para personas mayores de 65 años.
La diferencia con otros seguros de decesos radica en que la prima se ha de abonar en un único pago.
Contratar un seguro de decesos de prima única tiene múltiples ventajas.
La compañía aseguradora se encargará íntegramente de todas las gestiones derivadas del fallecimiento, liberando a los familiares de la realización de cualquier trámite en momentos difíciles.