Los Desperfectos son aquellos daños o perjuicios que están cubiertos por la póliza de un seguro. Es decir, son el resultado directo de un incidente. Estos daños pueden variar desde pequeñas averías hasta eventos más significativos, como daños a la propiedad por incendios o inundaciones. La cobertura de estos desperfectos dependerá de las condiciones y los límites que se especifiquen en la póliza.
¿Cómo reclamar una indemnización?
Cuando se produce un desperfecto, el primer paso será recopilar pruebas del siniestro y contactar con la compañía de seguros. Luego, la aseguradora evaluará la reclamación y determinará si el desperfecto está cubierto o no por la póliza. Si el seguro cubre estos daños, la compañía indemnizará al asegurado según los términos y las condiciones del contrato. En caso contrario, el tomador del seguro podrá actuar por vía judicial.