Mejorar la distribución del espacio y el aspecto de tu hogar es un proyecto que ilusiona, haciendo que las molestias causadas por la suciedad, el desorden y el ruido no sean nada en comparación con la emoción de estrenar cocina, baño o habitación nueva sin tener que cambiarte de domicilio. Entrar en reformas es una decisión muy importante, y para ello, debes contratar profesionales que te ofrezcan soluciones eficientes a los problemas que quieras solucionar. Por eso, se hace necesario tomar las medidas de precaución necesarias para garantizar la seguridad de todos los profesionales involucrados en caso de accidente.
Lo primero que debes saber es que, contratar a uno o varios albañiles, te convierte en el contratista de la obra, y si bien es cierto que tu seguro de vivienda puede tener servicio de bricolaje o incluso, llegar a cubrir algún desperfecto, no cubre los posibles accidentes que los trabajadores puedan tener durante la jornada laboral. Ante este escenario lo más recomendable es que hables con tu asesor de seguros para evaluar las pólizas más convenientes para asegurar a trabajadores temporales contratados por ti.
Esta es una de las razones de peso por la que los expertos recomiendan no contratar trabajadores sin contrato previo y, en la medida de lo posible, evitar obreros que trabajen de forma independiente. Sin embargo, si lo que necesita tu casa son cambios pequeños y no te sale a cuenta contratar los servicios de una empresa, debes exigir cierta documentación antes de cualquier contratación, de manera que cuentes con las garantías necesarias ante un accidente laboral, un reclamo por irregularidades en la obra o el abandono de la misma antes de finalizarla.