La Alteración del Riesgo es un concepto que hace referencia a aquellos cambios que afectan a la evaluación inicial que una compañía de seguros ha hecho de un riesgo. Un ejemplo puede ser la edad en un seguro de salud, ya que, si esta póliza se ha contratado siendo joven, a medida que pase el tiempo, la aseguradora asumirá un riesgo mayor. Pues, la edad traerá consigo patologías y enfermedades que antes no padecía el tomador de la póliza.
¿Qué cambios se producen con una alteración del riesgo?
A menos que exista una cláusula en la póliza en la que se especifique que no habrá modificación alguna, si el riesgo aumenta, generalmente, se producen cambios:
● Incremento de las primas: con el fin de poder ajustar el riesgo que la compañía está asumiendo en la actualidad para garantizar la protección adecuada.
● Cancelación de la póliza: sobre todo, cuando el riesgo es muy elevado, como puede ser en el caso de un conductor que tiene un número elevado de siniestros al año.
En la alteración del riesgo se puede producir tanto una agravación como una disminución de este. En ambos casos, es importante que el tomador del seguro informe a la compañía de su situación actual para evitar que las coberturas se le anulen y poder hacer las modificaciones pertinentes que le permitan estar protegido ante cualquier circunstancia.
