No se trata de una patología reconocida ni tipificada puesto que no existen estudios ni evidencia científica que lo avale, pero lo que sí tenemos claro es que esta nueva expresión ha llegado para quedarse con nosotros como muchas otras cosas, nuevos hábitos y emociones, producto de la aparición del coronavirus en nuestras vidas.
El “síndrome de la cabaña” hace referencia al fenómeno que muchas personas han experimentado después de pasar más de tres meses confinados. Hablamos de un estado anímico, mental y emocional motivado por el auténtico miedo que provoca salir a la calle y exponerse al riesgo de contagiarse por el COVID-19. Es más común de lo que muchos creen. De hecho, según un estudio realizado por la Universidad Europea, 7 de cada 10 personas sienten temor por contraer el virus en su entorno más cercano.
Contar con un seguro médico puede aliviar esa sensación de inseguridad que aparece cuando nos exponemos demasiado a las noticias y reconocemos que nos encontramos ante una situación nada convencional, y con la que tendremos que aprender a convivir durante un buen tiempo. Además, es fundamental trabajar en la capacidad de resiliencia y entereza; dos aspectos imprescindibles para afrontar situaciones complejas con una actitud positiva y que pueden trabajarse con la ayuda de un especialista.
Sin duda alguna, el regreso a la “nueva normalidad” no es un proceso fácil, ni mucho menos sencillo. Tampoco es igual para todas las personas: algunos pueden sufrir de ansiedad, estrés, depresión o incluso de fobia social. Para muchos, el miedo a salir, relacionarse y contagiarse sigue presente. Si es tu caso o el de algún familiar o amigo, sigue leyendo las recomendaciones que desde Allianz te compartimos para ganar la batalla contra el “síndrome de la cabaña”.